Es una realidad que las empresas vinculadas con el mundo tecnológico o que desarrollan
su modelo de negocio con un apoyo tecnológico importante, han aumentado en todo el
mundo en los años recientes. Ya no basta con producir algún bien o dar algún servicio, sino
la forma en la que eso a lo que se dedica llega a los clientes, para por un fuerte respaldo
tecnológico, tanto en los medios de producción directos, como en los servicios de
administración de información, manejo de datos y el márketing necesario para sus
clientelas.
Estas nuevas empresas, con ese enfoque altamente tecnológico, las llamamos Startups y
aunque no tienen traducción precisa al castellano, el concepto se entiende como empresas
de reciente creación y con alto contenido tecnológico.
Así pues, nos debemos preguntar ¿qué perfiles profesionales requieren estas empresas,
adicionales a los técnicamente o industrialmente necesarios?
Sin duda, será necesario contar con la colaboración de un profesionista en la administración
de empresas. Para poder dirigir un proyecto que inicia, darle rumbo, sentido y precisión, se
necesita contar con el enfoque estratégico de una persona que conozca los principios
generales de la administración de empresas. La organización del equipo y sus tareas, así
como el seguimiento preciso a las metas y objetivos que la organización se plantee, son
parte fundamental del trabajo diario del administrador de empresas.
Si bien el Administrador de empresas tiene una visión global de la empresa y su entorno,
hace una mancuerna extraordinaria con el ingeniero industrial. La capacidad del ingeniero
industrial para ordenar los procesos productivos al interior de la compañía y la interacción
de las diferentes cadenas de procuración de materiales, inventarios y producción, es
fundamental para el crecimiento de una empresa que inicia.
En este entorno tecnológico, de grandes cambios y de tendencias oscilantes, es muy
importante contar con expertos en marketing o mercadotecnia. Saber a quién se le quiere
vender, cómo se le va a vender, por qué medio se le venderá el producto y la manera en la
que recibirá lo que nos ha comprado, son premisas básicas que una startup debe tener
definidas y la mejor forma de hacerlo es mediante una persona que conozca de
mercadotecnia. Sí, hoy en día está en boga la mercadotecnia digital, sin embargo ésta es
sólo una especialización de quien domina y entiende la mercadotecnia en general. El
componente digital de la mercadotecnia es una herramienta adicional a lo que todo buen
mercadólogo debe conocer.
Como podemos ver, por innovador que resulte cualquier startup o empresa de reciente
creación con alto enfoque tecnológico, es necesario contar en su estructura organizacional
con puestos y perfiles que podríamos llamar tradicionales. Estos perfiles terminarán
aportando solidez y fortaleza en el momento en que la startup necesita despegar con orden,
estrategia y enfoque hacia sus clientes.
 
			
					 
									

 
			 
	 
	 
	 
	